Es un masaje focalizado de media pierna a planta de los pies, donde la terapeuta estimula con “un palito de madera, dedos o nudillo” los diferentes puntos reflejos del cuerpo, haciendo apertura de canales energéticos. Si se toma de 1 hora, los últimos 15 minutos se realizan toques de desbloqueo en cuello y espalda.